Estrategia de datos: la hoja de ruta para ser una empresa data-driven
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Estrategia de datos: la hoja de ruta para ser una empresa data-driven

Los datos son el nuevo petróleo, pero sin una estrategia clara, se quedan sin refinar. Muchas empresas invierten en herramientas y proyectos de analítica, pero siguen atrapadas en silos, con baja calidad de información y decisiones basadas en la intuición.

Los datos se han consolidado como uno de los activos más valiosos de cualquier organización. Sin embargo, no basta con acumular información o invertir en herramientas tecnológicas: lo que realmente marca la diferencia es contar con una estrategia clara que transforme esos datos en conocimiento accionable.

Las empresas que carecen de ella suelen enfrentarse a retos comunes: procesos poco eficientes, métricas inconsistentes entre departamentos, dificultades para acceder a información fiable y una dependencia excesiva de TI.

Una estrategia de datos bien diseñada permite superar esos obstáculos y convertir los datos en una verdadera palanca de crecimiento, alineada con los objetivos del negocio. En este artículo exploraremos qué es (y qué no es) una estrategia de datos, por qué resulta imprescindible y cuáles son los pasos para implementarla con éxito.

En primer lugar, ¿qué es y qué no es una estrategia de datos?

Una estrategia de datos no se limita a comprar herramientas, almacenar información o contratar analistas. Tampoco es un proyecto aislado que finaliza al implementar un software de BI o una plataforma de análisis.

En su esencia, una estrategia de datos es un plan integral que define cómo una organización captura, gestiona, integra y utiliza la información para generar valor real en sus decisiones y procesos. Implica alinear personas, procesos y tecnología con los objetivos del negocio, garantizando que los datos sean accesibles, fiables y útiles para quienes los necesitan.

Lo que no es una estrategia de datos:

  • No es un repositorio de datos gigante sin un propósito claro.
  • No es únicamente tecnología ni software de análisis.
  • No se reduce a proyectos aislados de reporting o dashboards.
  • No consiste en seguir tendencias o comprar soluciones “porque otros lo hacen”.

Lo que es una estrategia de datos:

  • Un marco claro que guía cómo se capturan, almacenan y transforman los datos en insights.
  • Un proceso continuo que garantiza calidad, seguridad y gobernanza de la información.
  • Una hoja de ruta que conecta la información con la toma de decisiones y los objetivos estratégicos.
  • Un enfoque que involucra a toda la organización, desde líderes de negocio hasta equipos técnicos.

En otras palabras, una estrategia de datos efectiva convierte la información en un activo tangible, capaz de mejorar la eficiencia operativa, optimizar recursos y descubrir oportunidades de negocio que, de otra manera, permanecerían ocultas.

Por qué una estrategia de datos es imprescindible

Vivimos en un mundo saturado de información. Cada interacción con clientes, proveedores o empleados genera datos que, si se gestionan correctamente, pueden impulsar decisiones más rápidas, precisas y estratégicas. Sin una estrategia clara, las empresas enfrentan varios riesgos:

  1. Decisiones basadas en intuición: Sin datos confiables, las decisiones dependen del “olfato” o de experiencias pasadas, limitando la innovación y aumentando el margen de error.
  2. Silos de información: Los datos dispersos entre departamentos impiden obtener una visión completa del negocio y generan inconsistencias.
  3. Baja calidad de información: Datos incompletos, duplicados o desactualizados afectan directamente la eficiencia y la confianza en los análisis.
  4. Oportunidades perdidas: Sin insights claros, muchas oportunidades de optimización, crecimiento o innovación permanecen invisibles.

Una estrategia de datos transforma los datos en un activo estratégico, asegurando que la información correcta llegue a la persona adecuada, en el momento oportuno y con la calidad necesaria para tomar decisiones con confianza.

Además, en un contexto donde la inteligencia artificial y la analítica avanzada están cada vez más presentes, tener datos bien gestionados se convierte en un requisito previo para aprovechar todo su potencial. Las empresas que no lo hacen quedan en desventaja frente a competidores más ágiles y data-driven.

Los pilares de una estrategia de datos efectiva

Una estrategia de datos sólida no surge por casualidad; se construye sobre pilares fundamentales que aseguran que los datos sean confiables, accesibles y útiles para toda la organización. Entre los más importantes se encuentran:

  1. Gobierno del dato
    Establecer reglas claras sobre quién puede acceder a los datos, cómo se gestionan y cómo se protegen. Incluye políticas de calidad, privacidad y seguridad. Sin un buen gobierno, incluso los mejores análisis pueden estar basados en información errónea.
  2. Arquitectura de datos
    Diseñar la forma en que los datos fluyen, se almacenan y se integran. Una arquitectura bien definida permite romper silos, unificar fuentes y garantizar que la información sea consistente y confiable.
  3. Calidad y gestión de datos
    Asegurar que los datos sean completos, precisos y actualizados. Esto implica procesos de limpieza, normalización y monitoreo continuo. La calidad del dato es la base de cualquier análisis efectivo.
  4. Analítica y explotación de datos
    Transformar los datos en insights accionables mediante herramientas de análisis, dashboards e inteligencia artificial. Aquí es donde la información deja de ser un registro y se convierte en ventaja competitiva.
  5. Cultura del dato
    Fomentar que toda la organización valore y use los datos en sus decisiones diarias. Una estrategia de datos solo tiene impacto si las personas confían en la información y la integran en sus procesos.

Cada pilar refuerza a los demás: sin gobierno, no hay calidad; sin arquitectura, no hay integración; sin cultura, los insights no se aplican. Una estrategia integral combina todos estos elementos para convertir los datos en un verdadero motor de crecimiento.

Cómo implementar una estrategia de datos paso a paso

Implementar una estrategia de datos no es solo un proyecto tecnológico; es un proceso integral que combina personas, procesos y tecnología. A continuación, te presentamos las etapas clave:

Paso 1: Diagnósticar y evaluar el estado actual de la organización

Antes de definir metas futuras, debemos conocer el punto de partida (el nivel actual de madurez data-driven). Esto nos ayudará a establecer objetivos alcanzables y a tomar medidas realistas. Para obtener una imagen completa del análisis y madurez de los datos, necesitamos:

  • Un inventario de las herramientas, tecnologías y sistemas que se utilizan en la actualidad.
  • Una descripción de la infraestructura de datos, así como de la arquitectura de datos existente.
  • Una evaluación de las habilidades del equipo en relación el el análisis de datos.

En Mind, disponemos de un modelo de madurez propio que nos permite definir dónde están nuestros clientes hoy y qué se necesitaría para avanzar en la escala.

Al comprender su estado actual, podemos identificar brechas, dónde hay problemas conocidos y qué necesita optimizar (tecnología, procesos, personas, todo) para cumplir con los objetivos comerciales.

El análisis de madurez de datos sirve como punto de referencia para medir el progreso a medida que el cliente aumenta sus capacidades y realiza tareas de su estrategia de datos.

Paso 2: Entender los objetivos del negocio

Las estrategias de datos deben estar alineadas con los objetivos estratégicos de la empresa; de lo contrario, se corre el riesgo de priorizar los proyectos equivocados, perder información, desperdiciar tiempo y recursos. Esto implica:

  • Identificar a los actores clave del negocio que podrían verse beneficiados y sus necesidades.
  • Profundizar en los diferentes departamentos para entender las actividades y su relación con el resto de la compañía (la actividad presupuestaria nos da pistas sobre la consecución de objetivos).
  • Recopila información sobre métricas y KPI relevantes
  • Presenta case studies para motivar al uso de los datos

Con esta información documentada, es posible empezar a crear un registro de casos de uso que se incluirán en su hoja de ruta de estrategia de datos (Continua en el punto 6)

¡STOP!: Una estrategia de datos es una actividad corporativa. Es importante contar con el apoyo ejecutivo, de el CEO, el Director General o un lider que tenga capacidades integrales en la organización y usuarios clave que representes áreas estratégicas de la empresa.

Paso 3. Arquitectura y tecnología de datos

Es fácil dejarse llevar por la moda y las últimas tecnologías y querer elegir la herramienta “más nueva” del mercado. También es fácil sentirse abrumado por la cantidad de opciones, cada vez mayor, y decidir quedarse con lo que se tiene o adoptar un enfoque de un solo proveedor.

Existen formas efectivas de abrirse paso entre el ruido del mercado y elegir la tecnología que funcione mejor para cada situación. Para ello, la clave es:

  • Concentrarse en cómo las herramientas modernas permiten que el personal esté más orientado a los datos (es decir, evitar la mentalidad de modernizar por modernizar). Debemos pensar en la relevancia, la accesibilidad y el rendimiento de la tecnología.
  • Relevancia: ¿Quién utilizará la tecnología? ¿Satisfará sus necesidades? La tecnología debe organizar y presentar los datos de una manera significativa para los usuarios comerciales.
  • Accesibilidad: los departamentos y empleados se enfrentan a numerosos obstáculos a la hora de acceder a los datos. Por ello, debemos considerar una herramienta que permita tomar decisiones basadas en datos a todos los miembros de la empresa.
  • Rendimiento: Existen tecnologías potentes en el mercado que aceleran el proceso de transformación de datos. Por ello, debemos considerar herramientas que permitan a los usuarios ser proactivos y no reactivos.
  • Utilizar metodologías establecidas y combinaciones tecnológicas probadas.
  • En lugar de identificar un enfoque universal, utilizamos una selección de herramientas personalizada según el nivel de madurez, los tipos de datos, el tamaño y la velocidad, así como el tamaño y la estructura del equipo con nuestros clientes.
  • Existen arquitecturas de datos y combinaciones de tecnologías comprobadas que funcionan muy bien juntas (por ejemplo, BigQuery, Snowflake, dbt y Qlik o Looker) o soluciones preconfiguradas como Mind Ocean.
  • Abordar la tecnología en cada etapa del ciclo de vida de los datos. Los datos pasan por muchas etapas para que estén listos para el análisis. Debemos garantizar de que cada etapa cuenta con la tecnología y los procesos adecuados para mantener la integridad de los datos y generar el máximo valor.

Etapas del ciclo de vida de los datos.

Al elegir las herramientas y tecnología, debemos recordar que no son componentes independientes, sino partes integradas de la arquitectura de datos.

Una arquitectura de datos moderna representa todas las etapas del ciclo de vida de los datos. Como vemos en esta imagen: herramientas para cada fase del ciclo de vida, incluida la extracción e ingesta, el almacenamiento y la replicación de datos, la transformación de datos, el almacén de datos y la visualización de datos.

4. Fomentar un equipo de análisis de datos

El éxito de una estrategia de datos depende tanto de las personas como de la tecnología.

El primer paso para crear un equipo de análisis de datos eficaz es elegir o identificar su modelo operativo, que determina la estructura del equipo y las funciones necesarias para alcanzar sus objetivos.

Hay tres tipos de modelos operativos a los que una organización puede adherirse y la decisión depende del tamaño, los recursos de cada organización y de sus necesidades de datos actuales y futuras.

  • Descentralizado: cada línea de negocio gestiona sus propios datos. Genera un enfoque colaborativo para cuestiones como la gestión de datos, la estrategia de datos y la inteligencia empresarial.
  • Centralizado: una única unidad especializada se encarga de todas las iniciativas de datos, lo que permite una gestión de datos proactiva y una toma de decisiones optimizada.
  • Híbrido: combina lo mejor de ambos modelos y permite una gestión y gobernanza de datos consistentes y la libertad de cada línea de negocio para hacerse cargo de sus iniciativas de datos y análisis.

Una vez determinado el modelo operativo, deberemos evaluar las habilidades del equipo y desarrollar un plan de formación para cerrar posibles brechas.

Para ello, deberemos comenzar por comprender las fortalezas del personal interno y dónde necesitarán apoyo. Si requieren capacitación en nuevas tecnologías, como IA generativa, o en actualizaciones de arquitectura, o bien si es necesario contratar más personal.

La evaluación debe alinearse con el modelo operativo, considerando si los analistas estarán vinculados a una unidad de negocio o a TI, y cómo TI respaldará las necesidades de análisis. Además, herramientas como evaluaciones y planes de incentivos pueden fomentar el uso adecuado de los datos en la organización.

Gestión de la demanda y capacidad

La gestión efectiva de un departamento de datos requiere un equilibrio preciso entre la demanda de servicios y la capacidad del equipo para entregarlos. Es fundamental mantener un registro detallado de las solicitudes entrantes, categorizándolas por tipo, complejidad y una estimación preliminar. Esta visibilidad permite identificar patrones en la demanda, anticipar picos de trabajo y detectar áreas donde la capacidad actual puede ser insuficiente.

Cuando el volumen o la complejidad de los proyectos excede las capacidades internas, los líderes deben evaluar estratégicamente si la solución óptima es aumentar la plantilla permanente o recurrir a servicios externos especializados. Esta decisión debe basarse no solo en el volumen actual de trabajo, sino también en proyecciones futuras y en la naturaleza estratégica de los proyectos, considerando que algunas capacidades críticas deberían mantenerse internamente mientras otras pueden tercerizarse de manera eficiente.

5. Gobernanza de datos sencilla y eficaz

La gobernanza de datos es lo que en última instancia conduce a asegurar datos de alta calidad y promueve su uso responsable. Existen tres claves para garantizar su éxito:

  • Práctico y mantenible.
  • Es un proceso continuo. La gobernanza de datos es un viaje, no un destino
  • Es un conjunto de prácticas. La gobernanza de datos no es una aplicación ni se resuelve con un conjunto de softwares

Por ello, si no se implementa de manera adecuada, la gobernanza de datos puede tener un bajo nivel adopción y generar altos costes. Para evitarlo, el programa de gobernanza de datos debe ser diseñado teniendo en cuenta las necesidades específicas, el tamaño, la urgencia, la madurez y las capacidades de cada empresa.

La gobernanza de datos requiere liderazgo. Un buen punto de partida es desarrollar un glosario empresarial, es decir, un documento vivo que defina de manera todas las métricas y dimensiones disponibles para el usuario final. En este artículo te contamos como implementar una gobernanza de datos fácil y efectiva y si necesitas profundizar no dudes en contactarnos para que te ayudemos.

6. Definir una hoja de ruta clara

La hoja de ruta de la estrategia de datos es el plan que hace posible todo el trabajo previo realizado. Define los pasos necesarios para pasar del estado actual al deseado, pero antes de comenzar con la ejecución, es crucial priorizar las actividades.

Para ello, para cada acción recomendada, debe evaluarse su viabilidad y el valor comercial que aportará. El plan debe enfocarse en las actividades más fáciles de implementar que generen beneficios rápidos.

Una matriz de priorización nos ayudará a identificar los proyectos de mayor viabilidad y valor que deben iniciarse primero. Otros factores clave a considerar en la hoja de ruta son:

  • Disponibilidad del personal y necesidad de recursos externos.
  • Proceso de presupuestación, especialmente si se requiere inversión de capital inicial.
  • Proyectos en competencia que puedan limitar la disponibilidad de recursos.
  • Hitos importantes como lanzamientos de productos o fusiones planificadas.

Incluir un cronograma en la hoja de ruta, con logros parciales, mantiene al equipo motivado y enfocado.

7. Promover un cambio cultural empresarial

Una vez creada la estrategia de datos y con una hoja de ruta lista para poner en acción, es importante también abordar la gestión del cambio, ya que los equipos se deberán enfrentar a nuevas responsabilidades y expectativas. Si no se enfoca este cambio cultural, la estrategia de datos no alcanzará todo su potencial.

Con el fin de promover una cultura basada en datos, debemos:

1. Capacitación y habilitación: tras evaluar las habilidades del personal, debemos planificar cómo equiparlos con el conocimiento necesario para ser efectivos, incluyendo formación en alfabetización de datos, nuevas tecnologías y mejores prácticas.

2. Apoyo presupuestario: La estrategia de datos es un proceso continuo que requiere apoyo financiero constante. Para justificar el presupuesto, debemos demostrar cómo la estrategia ha ayudado a cumplir los objetivos corporativos. No solo medir “horas ahorradas”, sino cómo ese tiempo se ha utilizado para agregar valor.

3. Comunicación: Una comunicación clara y constante sobre los cambios es esencial para el éxito de las iniciativas de datos. Debemos realizar un plan que especifique qué, cuándo y cómo se informará a los equipos sobre los cambios, nuevas métricas a analizar, futuras iniciativas y contenido educativo.

Cómo una estrategia de datos eficaz influye en la adopción de la IA

La adopción de la inteligencia artificial depende directamente de la calidad y organización de los datos. Tener modelos avanzados o herramientas sofisticadas no garantiza resultados si los datos no están estructurados, limpios y accesibles. Una estrategia de datos eficaz proporciona precisamente eso: un marco que asegura que la información sea confiable, esté bien documentada y pueda ser utilizada de manera eficiente para entrenar algoritmos y generar insights precisos. Esto no solo reduce errores y sesgos, sino que también acelera la capacidad de innovación en toda la organización.

El acceso controlado a los datos es otro factor clave. Los equipos de IA necesitan poder explorar y combinar información de distintas fuentes sin comprometer la seguridad ni la privacidad. Una arquitectura de datos bien diseñada establece flujos claros, permisos adecuados y pipelines automáticos que facilitan el trabajo de los científicos y analistas, permitiendo que los proyectos de IA avancen con agilidad. Además, la incorporación de metadatos y documentación detallada proporciona el contexto necesario para interpretar correctamente la información, lo que reduce riesgos y mejora la trazabilidad de los modelos.

Por último, una estrategia de datos sólida asegura escalabilidad y actualización continua. Los negocios evolucionan, y los datos cambian constantemente; contar con una infraestructura flexible permite incorporar nuevas fuentes y adaptar los modelos de IA rápidamente, sin perder calidad ni consistencia. A esto se suma la importancia de la cultura del dato: una organización que valore la toma de decisiones basada en información real y no en intuiciones aprovecha al máximo el potencial de la IA, integrándola en procesos cotidianos y generando un retorno tangible de la inversión en tecnología.

En conjunto, una estrategia de datos eficaz no solo optimiza la gestión de la información, sino que multiplica el valor de la inteligencia artificial, transformando datos en decisiones más precisas, procesos más automatizados y oportunidades de innovación sostenibles.

Los datos pueden ser el motor de tu negocio, pero solo si están bien gestionados. Una estrategia clara permite decisiones basadas en evidencia, elimina silos y prepara el camino para la adopción de inteligencia artificial. Implementarla es el primer paso para transformar información en resultados reales.

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